Para mejorar como corredor, no sólo hay que correr

Para mejorar como corredor, no sólo hay que correr

Parece una contradicción el título de este artículo, pero es muy frecuente. La inmensa mayoría de los corredores, hablo sobre todo de los populares, para entrenar una carrera, se limitan a correr. Se marcan un ritmo y, dependiendo de la distancia que se han propuesto como objetivo, corren más o menos tiempo. Si van con gente siempre está el momento en el que se tensa el ritmo, y después se vuelve a correr a ritmo.

 
Pasa en muchos deportes, tenemos que proponernos diferentes tipos de entrenamiento.
No voy a entrar en la infinidad de maneras de programar una sesión, sino en tratar de englobar de una manera amplia todos los grupos de sesiones que se pueden hacer:
  • Carrera continua: ésta es la más utilizada, a diferentes ritmos, ya sea en asfalto, arena o bosque.
  • Fartleck: es un modo de entrenamiento continuo en el cual diferenciamos secuencias en el ritmo utilizado. Por ejemplo, un fartleck podría consistir en 30’ haciendo 4’ en Z1 (percepción de carrera suave) + 1’ en Z4 (percepción de carrera intensa).
  • Series en continuo: por ejemplo, hacer 3 series de 2000m a umbral recuperando 1000m en regenerativo.
  • Cuestas: aquí podríamos meter cuestas cortas, largas, con mayor o menor pendiente, trail,…
  • Series con recuperaciones pasivas (típicas de pista de atletismo): de diferentes longitudes y con diferentes recuperaciones.
  • Interval training: es un método en el que se fracciona una distancia en pequeños tramos y se caracteriza por estar acompañada de una recuperación activa, mediante un trote suave o caminando. Ejemplo: 15 x 200m al 80%, vuelta de cada serie caminando.
  • Otros ejercicios: multisaltos y/o pliometría, técnica de carrera, core training, acondicionamiento físico general, musculación, movilidad articular, escaleras, descensos,…
Dependiendo de la época del año y la fase en la que te encuentras variarás las distancias y las intensidades.
 
¡A entrenar!